Más de 30 familias disfrutan de una Navidad diferente como iniciativa del cantante de música urbana Alex Zurdo y Radio Redentor, Inc.

La Navidad es una época llena de regalos y eventos donde las familias se reúnen para celebrar y compartir.  La iglesia cristiana celebra en nacimiento de Jesucristo y su propósito de salvación a los hombres, el cual llevó a cabo estableciendo el reino de los cielos en la tierra mediante milagros y portentos a lo largo de su vida en la tierra.  Jesucristo se acercó a los hombres conociendo su verdadera necesidad y supliendo la misma mediante sanidades y provisión de bienes, alimentos y supliendo sus necesidades básicas y más.  Hoy, es menester de la iglesia cristiana continuar haciendo discípulos con las enseñanzas de Jesucristo.  Este año, inspirado por la necesidad evidente en el pueblo el cantante de música urbana Alex Zurdo tuvo la iniciativa de conseguir cenas preparadas para que ciertas familias tuvieran la oportunidad de celebrar la Navidad como la gran mayoría de los puertorriqueños hace, provocando un espacio para unión, perdón y celebración.  Radio Redentor, Inc. abrazó la iniciativa convocando a su audiencia a identificar familias que estuvieran pasando por necesidades de diferente índole que les dificultara tener esta celebración, con el proyecto Regala una Cena, Regala Esperanza en la Navidad.  Así, los oyentes fueron nominando familias que podían evidenciar su situación de dificultad.  El resultado: más de 30 familias con historias diferentes, de distintos trasfondos, pudieron superar la aflicción y celebrar la verdadera navidad.  Sabiendo que no es la comida en sí, sino el saber que hay una comunidad que los ama, se ocupa y se mueve a su favor les hace recordar el amor de Dios manifestado en las personas.  Las empresas Walmart, Pueblo y Mueblerías Berríos se unieron a este proyecto aportando su granito para la realización del mismo.

Historias como familias que están reconstruyendo sus casas luego de sufrir un incendio, familias en las que tanto mamá como papá perdieron sus trabajos este año, personas limitadas por enfermedades y condiciones físicas, madres solteras, ancianos, familias separadas en busca de una excusa para reunirse y provocar reconciliación, son algunas de las que viven las familias que recibieron como regalo estas cenas.  No tenemos que mirar muy lejos para identificar la necesidad de nuestro vecino y actuar en favor de ellos.  Dios ya hizo provisión y este proyecto es evidencia de eso.  Felíz año 2025 para todos en la manifestación del avivamiento que tanto clamamos.